Pone la piel de gallina escuchar a Nacho Lozano cantando “Mi Gran Noche” imitando la voz de Raphael, saltando a la de Miguel Bosé y pasando por las de Fito Cabrales, Enrique Bunbury, Joaquín Sabina, Manolo García, Eros Ramazzotti, Joan Manuel Serrat, Melendi o David Bisbal, entre otros. Lo hace en tiempo real, como si fuera lo más fácil del mundo. Una voz camaleónicaprivilegiada y un talento inmenso lo ayudan a imitar un casi un centenar de vocestanto de cantantes como de otros personajes famosos. Nacho Lozano es el artista total: Es compositor, cantautor, actor de doblaje musical, profesor de música y está inmerso en una cantidad creciente de proyectos que siempre tienen la música como eje central.

En la actualidad está volcado en su nuevo espectáculo, ‘Inimitable’, donde encima del escenario pone a prueba su capacidad para suplantar la voz a los cantantes españoles y latinos más reconocidos. Un auténtico contorsionista de la voz capaz de imitar 60 artistas que abarcan ocho décadas de música. Todo surgió a comienzos de 2015 tras subir a internet un vídeo en el que cantaba Libre, de Nino Bravo, con las voces de hasta 20 artistas diferentes. Se hizo tan viral, que Nacho Lozano se animó a seguir esa línea de vídeos. Hoy día su canal de YouTube, con apenas 20 vídeos, supera ya ampliamente los 4.000 suscriptores que no quieren perderse ninguno de sus vídeos nuevos. Inimitable era la evolución natural de este éxito digital. El secreto de Nacho se encuentra en su facilidad para moldear su voz y en su propuesta: adaptar una única y misma canción con distintos ritmos y adaptando distintas voces con una armonía sorprendente.